El Mundial de Qatar ya ha comenzado y los corazones de millones de hinchas laten más fuerte que nunca. ¿Es esta una afirmación literal o un simple dicho?
Diversos especialistas afirman que la ansiedad y el estrés generados durante el período mundialista y en particular al mirar un partido de fútbol pueden ser realmente perjudiciales para nuestra salud.
¿Puede la pasión de un partido, en un país tan futbolero, provocar un infarto? ¿Cuáles son los riesgos de hacerse mala sangre por un resultado negativo?
“Hay evidencia científica que dice que el estrés que puede generar un partido de fútbol, en este caso magnificado por ser una Copa del Mundo sería un potencial problema cardíaco, especialmente en personas con antecedentes de riesgo cardiovascular. Numerosas publicaciones demuestran la estrecha relación entre el estrés mental y las más variadas patologías del aparato cardiovascular, como el estudio publicado por científicos alemanes en la prestigiosa revista médica The New England Journal of Medicine luego del mundial de fútbol celebrado en su país en 2006, donde se afirma que el número de infartos de miocardio se elevó hasta 2.5 veces los días de los partidos en que participaba la selección local en relación a otras fechas. Y se triplicaban las visitas a las guardias médicas durante y post partido”, explicó a Infobae Mario Boskis (MN 74002), cardiólogo y miembro titular de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC).
“La emoción de un partido y especialmente cuando el resultado no acompaña, puede producir en el hincha de fútbol, una discordancia entre su expectativa futbolera y la realidad de lo que está sucediendo en la cancha, y eso sin duda le genera estrés. El organismo libera sustancias químicas que pueden subir la presión arterial, incrementar la frecuencia cardíaca, derivar la sangre selectivamente a los músculos en las piernas, elevar la frecuencia respiratoria y hasta dilatar las pupilas, o sea, nos estamos preparando para luchar o huir de un enemigo invisible que nos está atacando. Sin embargo, estamos quizás solamente sentados en frente al televisor, pero eso el cuerpo no lo entiende. Mirar un partido de fútbol puede generar estrés mental. El organismo no se da cuenta si la persona está corriendo una carrera, subiendo una montaña o mirando un partido de fútbol. Y va a responder de la misma manera”, aclaró Boskis.
El estrés emocional que se genera durante los partidos de fútbol da lugar a un incremento de la actividad del sistema nervioso simpático. Es decir, la parte involuntaria del sistema nervioso que participa en las situaciones de lucha, huída, pánico, etc.
El estrés mental agudo aumenta no solo la producción simpática, sino que deteriora la función endotelial y crea un estado de hipercoagulabilidad de la sangre. Estos cambios tienen el potencial de romper las placas vulnerables de colesterol y precipitar una trombosis, resultando en un infarto de miocardio, ictus o muerte súbita.
Esta hiperactividad simpática puede dar lugar a desenlaces adversos en pacientes con insuficiencia cardíaca o con enfermedad de las arterias coronarias. Pero, incluso, puede afectar negativamente a individuos teóricamente sanos bajo condiciones extremas de estrés.
Por lo tanto existe una base fisiopatológica que explicaría el peligro de ver un partido de fútbol. Más aún considerando que otros factores que pueden ser desencadenantes de un ataque cardíaco son la ingesta copiosa de alcohol, una comilona y fumar en exceso, todas prácticas que suelen darse cuando los argentinos nos juntamos a comer un asado o una picada para ver un partido.
Sin embargo, el doctor Gustavo Ontiveros, médico cardiólogo, (MN 91682) presidente de la Fundación para la Prevención de la Muerte Súbita (Fupremus) y miembro de la American Heart Association (AHA) y la European Society of Human Genetics (ESHG), marca una diferencia respecto a sus colegas y afirma que “no es posible con las evidencias actuales” establecer de modo consistente una relación directa de significancia entre las emociones despertadas por los partidos del mundial y un aumento en los eventos cardiovasculares. “Quizás, durante este mundial y haciendo uso de la tan promocionada big data pudiera evaluarse de forma más precisa y con menos sesgos tal vinculación. Independientemente de que esto ocurra y podamos en algún momento comprender realmente si tal vinculación es significativa, es imprescindible evitar caer en miradas simplistas de un problema complejo, porque ello, podría conducirnos a tomar posturas erróneas y contraproducentes”, sostuvo Ontiveros.
Estudios científicos que avalan la preocupación de los cardiólogos
“El hallazgo que observaron los expertos fue determinado inesperadamente por el equipo argentino. Estos autores no observaron ningún aumento de eventos cardiovasculares durante los partidos que jugó Inglaterra, salvo en el partido en que Argentina lo eliminó por penales tras empatar 2 a 2 en tiempo reglamentario. Esta eliminación, tan recordada por los argentinos, produjo un 25% de aumento de las internaciones por infarto agudo de miocardio en los 5 días posteriores al partido. Estos resultados se apoyaban en un estudio de los Países Bajos donde se había observado el mismo efecto negativo al ser eliminados por penales de la Eurocopa de 1996. Los autores concluyeron que sería conveniente suprimir la eliminación por penales en estos torneos, que por supuesto nadie tuvo en cuenta”, sostuvo el prestigioso cardiólogo y director del Servicio Cardiología del Instituto Cardiovascular de Rosario Andrés Orlandini.
“En este trabajo se concluye que la tasa de mortalidad cardiovascular y ACV entre los hombres mayores de 45 años se incrementaron un 50 % tras la eliminación en cuartos de finales de Países Bajos por Francia durante la copa de la Liga Europea de 1996″, completa Ontiveros.
El cardiólogo Jorge Tartaglione, afirma que se ha hallado la relación que existe entre el fútbol y los eventos cardíacos. “En el año 2006, durante del Mundial de Alemania, la selección alemana jugó 7 partidos. Y cardiólogos de Munich midieron la cantidad de personas que ingresaban en las unidades coronarias de esa ciudad. Cada vez que jugaba Alemania, se incrementaban los ingresos. El máximo ingreso fue durante el partido entre Alemania y Argentina que empataron y hubo definición por penales (Argentina quedó afuera en la recordada anécdota del papelito usado por el arquero Lehmann que sabía cómo pateaban los jugadores argentinos). Ni siquiera cuando perdió luego en las semifinales, hubo tantos eventos cardíacos registrados”, sostuvo Tartaglione.
El doctor Orlandini concluye: “Existe un riesgo de sufrir eventos cardiovasculares durante un partido de futbol, sobre todo si tenemos antecedentes previos y o muchos factores de riesgo, si somos hombres más todavía. Todo esto se ve facilitado si comemos en demasía, tomamos mucho, fumamos y si somos tan pasionales como los argentinos. Lo más peligroso de todo es la definición por penales. En base a esto aconsejo no realizar una gran comilona para ver el partido, no tomar en demasía ni fumar para calmar los nervios. Para los que tienen antecedentes cardiovasculares o muchos factores de riesgo (hipertensión, obesidad, diabetes, etc.) además de las recomendaciones generales aconsejamos una consulta con su médico para que lo guie en cómo comportarse. Siguiendo estas recomendaciones estamos seguros que todos podremos disfrutar de un excelente Mundial.
Por su parte, Ontiveros recomienda gestionar las emociones de modo saludable frente al televisor y disfrutar sanamente del espectáculo. “A gritar, cantar, abrazar, emocionarse y vivir plenamente esta fiesta de multitudes”, sostuvo.
Desde la Federación Argentina de Cardiología (FAC) se desarrollaron algunas recomendaciones para poder disfrutar los partidos cuidando la salud cardiovascular:
- Evitar el consumo excesivo de alcohol. Una cerveza no es problema, pero no hay que intentar tapar la ansiedad con varios vasos
- No consumir grasas o frituras en exceso. Tratar de reemplazar los clásicos snacks o picadas, que además contienen exceso de sal, por comidas más saludables
- Beber agua, ya que ayuda a bajar la ansiedad
- En lo posible no quedarse sentado durante todo el partido. Levantarse, caminar y hacer algunos movimientos ayuda a descargar tensiones
- No fumar
- Evitar el exceso de bebidas como el café y el mate por su alto nivel de cafeína y su consecuente efecto ansiolítico
Fuente: Infobae
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